26 noviembre, 2010
08 noviembre, 2010
En Santiago con el Papa
Este fin de semana estuvimos en Santiago de Compostela acompañando al Papa Benedicto XVI. Salimos de León a las nueve de la mañana del sábado y llegamos a Santiago sobre la una de la tarde. Nuestro objetivo era participar en la Misa del Papa para escucharle y acompañarle.
Samuel, Jorge y Álvaro en las calles de Santiago. |
Comimos en un parque y nos pusimos a buscar un sitio con pantalla gigante desde donde seguir la Misa del Papa. Desde el principio descartamos ir a la Plaza del Obradoiro, puesto que sólo había sitio para 6.000 personas. Finalmente encontramos sito en la antigua iglesia de San Martín Pinario en cuyo interior había una pantalla y bancos para sentarse. Como había tiempo hasta el inicio de la ceremonia, Pablo salió con Álvaro y Jorge a visitar los alrededores, mientas Charly guardaba el sitio y descansaba.
En la homilía Benedicto XVI lanzó un especial mensaje a los jóvenes: "Para los discípulos que quieren seguir e imitar a Cristo, el servir a los hermanos ya no es una mera opción, sino parte esencial de su ser." Otras ideas de la homilía de Santiago son:
- "Europa ha de abrirse a Dios, salir a su encuentro sin miedo, trabajar con su gracia por aquella dignidad del hombre que habían descubierto las mejores tradiciones..."
- La cruz, que es la señal del cristiano, es el supremo signo del amor llevado hasta el extremo.
- "No se puede dar culto a Dios sin velar por el hombre su hijo y no se sirve al hombre sin preguntarse por quién es su Padre y responderle a la pregunta por él". "...la Europa de la civilización y de la cultura, tiene que ser a la vez la Europa abierta a la trascendencia y a la fraternidad con otros continentes, al Dios vivo y verdadero desde el hombre vivo y verdadero."
Después de terminada la Misa pudimos visitar Santiago, nos tomamos una ración de riquísimo pulpo gallego y pasamos noche en La Estila. Al día siguiente regresamos pronto a León contentos de haber acompañado al Papa.
El domingo Benedicto XVI consagró la basílica de la Sagrada Familia de Barcelona. Un edificio todavía inacabado, pero realmente impresionante, está declarado patrimonio cultural de la humanidad. Allí el Papa pronunció otra homilía de la que sacamos algunas ideas:
- La gran tarea de la Iglesia es "mostrar a todos que Dios es Dios de paz y no de violencia, de libertad y no de coacción, de concordia y no de discordia".
- Junto a los progresos técnicos, sociales y culturales "deben estar siempre los progresos morales, como la atención, protección y ayuda a la familia, ya que el amor generoso e indisoluble de un hombre y una mujer es el marco eficaz y el fundamento de la vida humana en su gestación, en su alumbramiento, en su crecimiento y en su término natural. Sólo donde existen el amor y la fidelidad, nace y perdura la verdadera libertad".
Aquí tenéis algunas fotos de nuestra estancia en Santiago:
01 noviembre, 2010
Convivencia en el Llendón
El último fin de semana estuvimos de convivencia en El Llendón. Asistieron los mejores del club: Fon, Jorge, Miki, Sam y Álvaro con Pablo y Charly al frente. Llegamos al Llendón a media tarde del sábado 30 de octubre. Nada más llegar nos pusimos a jugar a fútbol hasta que ya no se podía ver por la oscuridad. Ya de noche cerrada cogimos la cena y nos fuimos hasta la Playa de España. Recogimos leña y con gran esfuerzo, por que la leña estaba húmeda, conseguimos encender una hoguera. Al calor del fuego cenamos. Al final de la cena un chaparrón nos hizo recoger y regresar a casa.
Fon, Samuel y Álvaro en la casa. |
Como esa noche nos cambiaban la hora y teníamos una hora más para dormir aprovechamos para jugar un buen rato al Tabú. Resultó muy divertido acertar palabras, hacer dibujos y gestos con el "flexicoco".
A la mañana siguiente asistimos a la Misa en la casa del Llendón y después de desayunar nos fuimos a la playa de Rodiles. Instalamos la red de vóley y ¡a jugar! Ya se va viendo un buen estilo en la mayoría de los jugadores. El viento nos dificultó el juego porque con frecuencia nos tiraba la red. Después del primer partido Miki, Jorge y Pablo se pegaron un baño. Especialmente Jorge y Miki estuvieron un buen rato saltando entre las olas a pesar de la fecha (31 de octubre) y del frío. Cuando estábamos jugando un nuevo partido se puso a llover con ganas y tuvimos que recoger todo a la carrera.
Entonces decidimos acercarnos hasta Gijón a buscar un tesoro de geocaching. Dejamos los coches al lado del estadio del Sporting y nos fuimos caminando hasta la estatua de La madre del inmigrante. En cuanto desciframos el mensaje secreto del geochacing localizamos el tesoro y dejamos constancia del hallazgo. Inmediatamente se puso a llover, primero suave, pero al poco cayó un chaparrón que nos caló a todos.
Ya en la casa nos pusimos ropa seca y comimos. Por la tarde estuvimos jugando al Tabú hasta que se nos hizo la hora de marchar. Recogimos y regresamos a León entre un auténtico diluvio. Después de todo, el tiempo nos permitió hacer todas las actividades programadas y disfrutar de una convivencia muy divertida.
El próximo fin de semana nos acercaremos hasta Santiago de Compostela para recibir al Papa Benedicto XVI. Mientras tanto puedes disfrutar de las mejores fotos de esta convivencia:
Etiquetas: actividades, convivencia, geocaching, Opus Dei
El optimismo en la educación de los hijos
La autoimagen que un niño tiene de sí mismo condiciona la manera de vivir, sentir e interpretar la realidad. Esa autoimagen positiva o negativa hace que la realidad se vea de manera diferente por parte de cada persona.
¿Cómo corregir?
Frases como “eres un desastre”, son valoradas de manera diferente por un niño que se siente valorado, que por otro que ha vivido el rechazo por parte de sus padres o educadores. El primero se muestra tolerante e interpreta esa afirmación como una frases coloquial, mientras que el que se siente rechazado hace una interpretación literal de la misma y es la confirmación de sus sospechas.Esta es la razón para que los padres corrijan la conducta de sus hijos desde un punto de vista positivo, transmitiéndoles que les quieran y que están contentos con ellos, pero no con su conducta. Deberíamos entrenarnos en utilizar frases como las siguientes u otras similares a ellas:
- “Eres un buen chico, pero esto que has hecho…”.
- “Te quiero mucho, pero te castigo porque…”.
- “Eres estupenda, pero tienes que mejorar en…”.
- “Después jugaremos a ese juego que te gusta, pero ahora tienes que tranquilizarte”.
- “Eres una buena chica, pero te has equivocado. Vete a tu habitación y piensa cómo puedes mejorar eso…”, etc.
El amor, la aceptación y el cariño enriquecen la educación y son muy buenos antídotos contra el estrés infantil, además ayudan en el desarrollo equilibrado de la persona.
La educación no debe ser una lucha de los padres para que los hijos alcancen las metas que los padres desean, sino la aceptación de lo que el niño es y no de lo que es capaz de conseguir.
El ciclo del optimismo o del pesimismo
Cuando un niño tiene la impresión de que no satisface a sus padres, de que saca malas notas, o de que se le da mal una asignatura, se siente insatisfecho.En cambio, cuando se siente valorado sin condiciones, y que sus padres están contentos con él, la autoimagen positiva favorece el desarrollo de pensamientos positivos y se activan todos los procesos cerebrales que intervienen en su desarrollo.
Cuando un niño es pesimista respecto a sus capacidades ve la vida desde el lado negativo y piensa que no será capaz de mejorar.
Desde muy pequeños, los niños buscan alrededor y aprenden a leer la cara y los gestos de sus padres. Los bebés ven la vida a través de los ojos de sus padres.
Basta observar con detenimiento la conducta de los niños pequeños para darse cuenta que, cuando un niño de unos dos años pasea por la calle cogido de la mano de su madre y se encuentra con un extraño que la saluda, mira a la cara de su madre para decidir cuál ha de ser su reacción ante el desconocido. Si le cae bien a su mamá, sonríe y se muestra abierto, pero si le cae mal a su madre; se mostrará huraño y se esconderá detrás de ella.
Cuando el niño o la niña van creciendo, su conducta se va ajustando a la autoimagen que ha construido en la infancia, hay un impulso que le empuja a la coherencia y le ayuda a entrar en resonancia con las situaciones que reafirman sus creencias y sensaciones internas.
El niño que tiene una imagen positiva de sí mismo, se identifica con la visión optimista y viceversa. Cuando el niño se considera incapaz de alcanzar las expectativas que le propone el entorno, se siente fracasado vive con miedo al fracaso. Comprueba que haga lo que haga, las cosas no mejoran y la vida se complica.